¿Qué es y para qué sirve Deprax?

Qué es y para qué sirve Deprax

La trazodona es un medicamento antidepresivo que sirve para tratar variedad de trastornos mentales. Por lo que es necesario conocer para qué sirve Deprax, nombre comercial de este fármaco, aunque su mayor uso está dirigido al tratamiento de la depresión y la ansiedad.

Posee un efecto sedante, lo cual puede ocasionar que el paciente sienta somnolencia. Esto permite que pueda ser usado para tratar cuadros de insomnio y otros trastornos del sueño como las pesadillas. Sin embargo, puede utilizarse de manera prolongada hasta seis meses ya que no provoca dependencia.

Índice
  1. ¿Qué es el Deprax?
  2. ¿Para qué sirve Deprax?
  3. ¿Cómo actúa el Deprax?
  4. ¿Cómo tomar Deprax?
    1. Adultos
    2. Pacientes de edad avanzada
    3. Pacientes con problemas de riñón
    4. Pacientes con problemas de hígado
    5. ¿Qué hacer en caso de sobredosis?
  5. Efectos secundarios
    1. Efectos que suponen la suspensión de Deprax
    2. Efectos adversos que necesitan evaluación médica
    3. Otros efectos secundarios 
  6. Advertencias
  7. Riesgos

¿Qué es el Deprax?

Deprax es el nombre comercial de un fármaco antidepresivo de segunda generación que se presenta en forma de comprimidos de 100 mg. Su principio activo es el trazodona, el cual pertenece al grupo de la fenilpiperazina. De esta manera, actúa como un inhibidor de la recaptación de la serotonina, lo cual favorece el aumento de serotonina en el cerebro. Al mismo tiempo, es un antagonista de los receptores 5-HT2A, un receptor de serotonina.

Fue descubierto en Italia en el año 1961 mientras se investigaba el desarrollo de antidepresivos de segunda generación. Son amplios los usos para qué sirve Deprax. Este medicamento posee un efecto ansiolítico e hipnótico, permitiendo que sea utilizado en el tratamiento de depresión crónica, insomnio y ansiedad. También ha sido implementado en casos de esquizofrenia, o para aliviar movimientos involuntarios causados por otros medicamentos.

Deprax

Algo que destaca en este fármaco es que su efecto puede observarse a partir de la primera semana de tratamiento, siendo considerado de gran efectividad. Resulta la primera opción en muchos casos ya que no favorece la ganancia de peso.

Aun así se debe usar con precaución, sobre todo por sus efectos secundarios, por lo que se suele recomendar administrar en dosis pequeñas. Además, es necesario poner mucha atención en casos de personas que han tenido pensamientos suicidas o han intentado quitarse la vida.

A pesar de esto, resulta una opción muy segura ya que se ha comprobado que no causa adicción. Esto resulta ventajoso al poder realizar un abordaje terapéutico hasta ver mejoría del paciente, pudiendo extenderse el tratamiento hasta 6 meses.

¿Para qué sirve Deprax?

El Deprax es un antidepresivo por lo que, como su nombre lo indica, se utiliza para el tratamiento de trastornos mentales relacionados con el estado de ánimo. Al mismo tiempo, posee efecto sedante e hipnótico, lo cual ha permitido que sea prescrito para abordar casos de trastorno de sueño. Incluso tiene usos terapéuticos en el tratamiento de síntomas causados por fibromialgia.

De esta manera, se reconocen los siguientes usos para qué sirve Deprax:

  • Depresiones mayores, con o sin ansiedad.
  • Ansiedad o preocupación excesiva.
  • Insomnio.
  • Trastornos de sueño, incluyendo las pesadillas.
  • Esquizofrenia.
  • Fibromialgia.
  • Dependencia del alcohol. También en casos donde se presentan movimientos involuntarios y temblores causados por esta adicción.
  • Trastornos de conducta que provocan irritabilidad y agresividad.
  • Previo a la realización de pruebas diagnósticas o procedimientos quirúrgicos.
  • Tratamiento de movimientos involuntarios causados por efectos secundarios de algunos medicamentos.
  • Bulimia nerviosa.
  • Trastorno disfórico premenstrual.

Se ha comprobado que puede ayudar a aliviar los síntomas causados por el síndrome de estrés postraumático. En este sentido, se ha notado mejoría en los cuadros de ansiedad e insomnio, reduciendo el constante estado de alerta del individuo afectado. 

Hay que tener en cuenta que este medicamento solo puede ser adquirido bajo receta médica, por lo que no se considera de venta libre. Es así como será necesario supervisión médica regular para evaluar los efectos y los cambios necesarios al tratamiento. No debe administrarse nunca sin la supervisión del psiquiatra. 

¿Cómo actúa el Deprax?

Deprax pertenece al grupo de medicamentos considerados inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina. De esta manera, inhibe la recaptación de serotonina al actuar como un antagonista de los receptores de este neurotransmisión, siendo más específicos, 5-HT2A, lo cual permite una mayor disponibilidad de serotonina, sobre todo en las sinapsis. 

Al tener efectos sobre estos receptores permite que sea posible mejorar el estado de ánimo, lo cual favorece controlar y tratar la ansiedad y la depresión. Y, al pertenecer al grupo de la fenilpiperazina, poseen una acción más selectiva, destacando una mayor eficacia ante otros antidepresivos.

También se ha comprobado que actúa como una bloqueador de receptores adrenérgicos alfa y las proteínas transportadoras de serotonina. En este sentido, esta acción puede ser perjudicial ya que aumenta el riesgo de desencadenar efectos secundarios, generando molestias considerables para el paciente. Es común que se desarrolle hipotensión ortostática, ocurriendo una baja de tensión tras ponerse de pie o permanecer mucho tiempo de pie.

¿Cómo tomar Deprax?

Al tratarse de un medicamento que debe administrarse bajo estricta vigilancia médica, será el médico quien indicará cuál es la ruta de tratamiento y cómo se tomarán las dosis. Es un medicamento que se vende en forma de comprimidos de 100 mg, por lo que su administración es por vía oral.

Dosis de Deprax

Por lo general se inicia con dosis mínimas de 100 mg, ajustando hasta un máximo de 400 mg siempre que sea necesario. En el caso de pacientes hospitalizados, se puede aumentar hasta 600 mg al poder mantener un control cercano. Existe la posibilidad de administrarlo en varias dosis o una dosis única según lo que mejor considere el médico. 

Cuando se consigue la dosis adecuada esta debe mantenerse al menos 4 semanas para lograr obtener sus efectos terapéuticos. Una vez que se haya culminado el tratamiento se procederá a reducir gradualmente hasta poder retirar Deprax. Nunca debe ser suspendido de manera abrupta. Esto puede ocasionar la aparición de síntomas como náuseas, dolor de cabeza y malestar general.

Adultos

  • El tratamiento se inicia con dosis de 100 a 150 mg. Si se hace en varias dosis, estas deben administrarse después de las comidas, así se podrán reducir los efectos secundarios. También se puede optar por una sola toma antes de dormir.
  • El médico irá ajustando el medicamento aumentando 50 mg cada 3 o 4 días. Esto se hará hasta lograr el efecto terapéutico deseado.
  • Cuando se mantienen dosis altas de 600 mg, solo se podrá administrar en varias tomas.
  • A pesar de que se distribuya a lo largo del día, se debe tomar una dosis mayor antes de dormir.
  • Los efectos beneficiosos no se detectan de inmediato. Si bien se observa una mejoría tras la primera semana, a partir de las 2 semanas es que se notarán sus beneficios. Incluso es posible que sea necesario esperar hasta las 4 semanas para ver los efectos de la trazodona.

Pacientes de edad avanzada

  • El médico indicará una dosis inicial de 50 a 100 mg. Puede administrarse en varias tomas o una sola antes de dormir.
  • En estos pacientes no debe administrarse una dosis única mayor a 100 mg.
  • Las dosis máximas diarias son de 300 mg.

Pacientes con problemas de riñón

  • Se hará una evaluación previa de la condición renal para determinar la dosis más adecuada para el paciente.
  • Es posible que el médico realice un control regular de la función renal mientras se mantenga el tratamiento.

Pacientes con problemas de hígado

  • Será necesaria una evaluación de la función hepática para determinar la dosis más adecuada. 
  • En general no se utilizarán dosis demasiado elevadas ya que la trazodona puede afectar la función hepática al ser metabolizado por el hígado.
  • El paciente debe someterse a una evaluación regular de la función hepática mientras se encuentre bajo tratamiento. Es posible que se considere cambiar de fármaco si se produce alguna complicación.

¿Qué hacer en caso de sobredosis?

En caso de ingerir más Deprax del indicado por el médico tratante, es necesario comunicarlo inmediatamente con el profesional de salud y acudir lo antes posible a urgencias. Hay indicar la dosis consumida del fármaco.

Es posible que presente los siguientes síntomas por sobredosis:

  • Somnolencia.
  • Mareos. 
  • Náuseas. 
  • Vómito.

En cuadros graves es posible que el paciente sufra:

  • Baja concentración de sodio en sangre.
  • Coma.
  • Convulsiones.
  • Disminución de la presión arterial.
  • Taquicardia.
  • Insuficiencia respiratoria.
  • Ritmo cardiaco irregular.

Es posible que los síntomas aparezcan 24 horas después de ocurrida la sobredosis. Para evitar estas situaciones, si se ha olvidado alguna toma no se repone. Se salta esa dosis y se continua con el tratamiento según lo pautado. Tampoco hay que tomar dosis dobles ya que puede provocar sobredosis.

Efectos secundarios

Al igual que muchos otros medicamentos, existe la posibilidad de que el consumo de Deprax provoque la aparición de efectos secundarios. Sin importar la gravedad de estos siempre será necesario notificar al médico lo que está ocurriendo. Estos síntomas llegan a ser muy molestos e interfieren en la calidad de vida del paciente.

Efectos que suponen la suspensión de Deprax

Se deberá suspender el tratamiento y acudir de inmediato con el médico en los siguientes casos:

  • Se presenta reacción alérgica con presencia de erupción cutánea, comezón o urticaria, inflamación de las manos, pies, labios o garganta. En este último caso puede aparecer dificultad para tragar.
  • Se produce erección dolorosa del pene pero sin excitación ni deseo sexual que no cede.
  • Aparece ictericia, notándose la piel de color amarillo y los ojos. Esto está posiblemente relacionado con el hígado.
  • Se presentan infecciones recurrentes.
  • Aparecen moretones sin causa aparente, pudiendo ser la causa una trombocitopenia.
  • Sufre de estreñimiento, vómitos, dolor e hinchazón abdominal sin estar asociada a otra causa.

Efectos adversos que necesitan evaluación médica

  • Aparecen pensamientos suicidas o con intenciones de autolesión.
  • Cansancio.
  • Fatiga.
  • Debilidad.
  • Palidez.
  • Mareos.
  • Convulsiones.
  • Hormigueo.
  • Entumecimiento.
  • Pinchazos.
  • Ardores en la piel.
  • Confusión.
  • Alucinaciones.
  • Temblores.
  • Inquietud.
  • Aumento de la sudoración.
  • Taquicardia.
  • Dificultad respiratoria.
  • Espasmos musculares.
  • Problemas para caminar.
  • Fiebre.
  • Ritmo cardiaco irregular.

Efectos secundarios Deprax

Otros efectos secundarios 

  • Somnolencia.
  • Malestar general.
  • Indigestión.
  • Diarrea.
  • Sequedad de la boca.
  • Aumento de la salivación.
  • Cambios en el gusto.
  • Obstrucción nasal.
  • Dolor de cabeza.
  • Visión borrosa.
  • Pérdida del apetito.
  • Pérdida de peso.
  • Desmayos.
  • Sensación de desvanecimiento al ponerse de pie rápido.
  • Insomnio.
  • Retención de líquidos.
  • Dolor en el pecho.
  • Dolor muscular.
  • Hiperactividad.
  • Dolor articular.
  • Movimientos musculares involuntarios.
  • Pesadillas.
  • Dolor en las extremidades.
  • Úlceras en la boca.
  • Dolor de garganta.
  • Agitación.
  • Problemas de memoria.
  • Vértigo. aumento de la presión arterial.
  • Disminución del deseo sexual.
  • Síntomas de gripe.
  • Delirios.
  • Dificultad para hablar o articular palabras.
  • Alteración de los valores en las analíticas de sangre, sobre todo en las células sanguíneas y enzimas hepáticas.
  • Problemas para orinar, pudiendo presentarse incontinencia o retención de orina.
  • Paranoia.

Advertencias

El médico realizará una evaluación para conocer los antecedentes y determinar si es segura la administración de Deprax. Por esta razón se debe comunicar si se es alérgico a la trazodona o algunos de los componentes del fármaco. Además, es necesario notificar si se padecen de problemas renales o hepáticos así como si se sufre o se han sufrido convulsiones.

Este tratamiento debe abordarse de manera distinta en casos donde se padezca de alguna de las siguientes afecciones:

  • Patología o afección cardiaca.
  • Hipertiroidismo.
  • Problemas para orinar, incluyendo incontinencia.
  • Glaucoma de ángulo estrecho.
  • Presión arterial baja.

Si bien se conoce para qué sirve Deprax, se ha observado que en casos de esquizofrenia y otros trastornos psicóticos puede ocurrir un agravamiento de los síntomas, sobre todo un aumento de la conducta paranoica. En todas estas situaciones es necesaria la suspensión del tratamiento. 

Algunos pacientes desarrollan una mayor tendencia a sufrir fracturas. Y en el caso de personas de edad avanzada, existe una mayor sensibilidad a los antidepresivos lo cual aumenta el riesgo de desarrollar efectos secundarios.

Cuando se toma por primera vez trazodona es posible que aparezcan pensamientos suicidas o de autolesión. Este riesgo aumenta en personas que han tenido esta conducta previo al tratamiento o son menores de 25 años. Por lo que es necesario esperar a que el medicamento haga efecto para observar sus beneficios y que estos síntomas desaparezcan.

Son pocos los estudios realizados en embarazadas, por lo que se considera que solo se utilice trazodona si es estrictamente necesario. Al mismo tiempo, puede provocar hipertensión pulmonar persistente del recién nacido. Si observa que su bebé se pone de color azulado y tiene dificultad repiratoria, acuda a urgencias. En cuanto a la lactancia, se considera seguro, sin embargo el médico quizás explore otras alternativas.

Riesgos

Hay que considerar que Deprax es un medicamento que no causa adicción o dependencia, algo común de las benzodiacepinas. Aun así, es necesario poner atención en ciertas situaciones. Al poseer un efecto sedante y causar somnolencia, se recomienda no manejar maquinaria pesada hasta que se estabilice el efecto.

Antes de una intervención donde sea necesaria el uso de anestesia, es indispensable comunicar al médico que se mantiene un tratamiento con trazodona. Tampoco debe mezclarse con alcohol ya que puede potenciar su efecto sedante, lo cual causa somnolencia y disminuye el estado de alerta. Está contraindicado en menores de 18 años ya que existe el riesgo de desarrollar pensamientos suicidas y de autolesión.

Rafael Aragón

Rafael Aragón

También te podría interesar...