Descubre los mejores consejos para conciliar el sueño

Los estudios científicos que se han ido realizando con el paso de los años han dejado claro que los seres humanos tienen una necesidad clara: el descanso. Los cuerpos de las personas no tienen recursos ilimitados, y pese a que en ciertas edades parece algo secundario, en cuanto se van cumpliendo años el organismo pide realizar pausas para recuperase.

Para poner en marcha este proceso no hay nada mejor que dormir. Ese periodo en el que el cuerpo y la cabeza se ponen en modo reposo para recuperarse de lo que ha sido el día es absolutamente imprescindible. Lamentablemente, hay personas que se encuentran con muchos problemas a la hora de poder conciliar el sueño, y cuyas noches se acaban convirtiendo en un auténtico reto.

Por suerte, existen diferentes consejos y rutinas que pueden ayudar a esas personas a las que les cuesta quedarse dormidos. ¿Es tu caso y quieres conocerlos? Pues continúa leyendo...

Horario regular de sueño

Para poder dormir con facilidad, resulta tremendamente recomendable irse a la cama y levantarse todos los días a la misma hora. Con esa simple acción, el cuerpo es capaz de establecer un ritmo de sueño natural por si solo.

Rutina relajante antes de dormir

Es recomendable intentar crear una especie de protocolo antes de irse a dormir. Este puede tener una duración de unos 30-60 minutos y debe estar orientado a actividades que relajen, como escuchar música, meditar, o incluso leer.

Buen entorno de sueño

Hay que procurar tener unas condiciones externas óptimas para poder conciliar el sueño. Para ello, hay que asegurarse que la habitación esté oscura, tranquila y con una temperatura ideal. Ayudas como los tapones para oídos o el ruido blanco resultan tremendamente útiles.

El problema de las pantallas

Por norma general, las pantallas de dispositivos como teléfonos, tablets o televisores emiten luz azul. Este efecto limita la producción de la hormona del sueño, por lo que no se recomienda su uso al menos una hora antes de irse a dormir.

Las consecuencias del consumo de sustancias

Meter en el cuerpo sustancias como la nicotina o la cafeína a altas horas del día puede afectar directamente al sueño, ya que son estimulantes. Algo parecido pasa con el alcohol, que, aunque suele contribuir a conciliar el sueño de forma rápida, luego no permite un descanso efectivo.

Ejercicio de forma regular

Llevar a cabo actividad física de manera regular es una de las rutinas más recomendables para dormirse más rápido, y de forma más profunda. Eso sí, es completamente desaconsejable realizar un ejercicio intenso antes de meterse en la cama, ya que provocará el efecto completamente contrario.

Estrés y ansiedad bajo control

Estos dos trastornos, bastante comunes a nivel general, pueden ser un grave problema para conciliar el sueño. Por ello, se recomiendan técnicas de relajación, meditación o yoga que puedan limitar sus efectos en el momento de irse a la cama.

Siestas muy moderadas

La costumbre de la siesta no está mal, pero no puede irse de las manos. Los expertos señalan que unos 20 o 30 minutos es lo ideal. Por otro lado, nunca pueden ser a una hora muy tardía, ya que pueden interferir en el sueño nocturno.