¿Qué pastillas son buenas para el dolor de estómago y cómo tomarlas?

El dolor a nivel abdominal es un malestar que puede llegar a ser incapacitante dependiendo de su intensidad. Al existir una variedad de causas y fármacos útiles para tratar esta afección, resulta difícil saber qué pastillas son buenas para el dolor de estómago y cuál es la más recomendable para cada caso.

Existe una gran gama de alternativas de venta libre que ofrecen un alivio rápido y eficaz, pudiendo ser la primera opción a tomar en cuenta. Sin embargo, es recomendable contar con la orientación de un profesional de la salud para evitar los efectos adversos y optar por un tratamiento que de solución al origen del dolor.

¿Qué tomar para el dolor de estómago?

El dolor de estómago es un síntoma bastante molesto que puede interrumpir nuestras actividades cotidianas. Es el término con que se denomina al dolor abdominal, y que puede irradiar incluso hasta la pelvis. Cuando esto sucede, se busca cualquier alternativa médica que pueda ayudar a aliviar estas molestias gastrointestinales.

En primera instancia se piensa en qué pastillas son buenas para el dolor de estómago, siendo una de las opciones más seguras siempre que se cuente con la guía de un profesional de la salud. Existen muchas alternativas de venta libre destinadas a aliviar de forma rápida y efectiva este malestar, pudiendo atender distintas causas que provoquen este dolor.

Antes de elegir alguna pastillas, es necesario tener en cuenta algunas recomendaciones para lograr administrar de forma segura estos fármacos:

• Usar responsablemente: si bien se trata de medicamentos de venta libre, es indispensable que la dosificación se realice según lo que especifica en las indicaciones. O en caso de que sea indicado por el médico, seguir las pautas para lograr un tratamiento adecuado.
• Consultar con un médico: si has probado alguna pastilla y los síntomas continúan o empeoran, se debe acudir a un médico para evaluar el cuadro clínico y que recete el tratamiento más indicado para cada caso en particular.
• Posibles contraindicaciones: algunos medicamentos interactúan con otros fármacos, siendo necesario notificar al médico o farmacéutico si lleva algún tipo de tratamiento. También se toma en cuenta si existe alguna condición que pueda verse complicada con la administración de la pastilla.

Ante todo se debe evitar la automedicación. Cualquier medicación que se desee administrar debe ser prescrita por un médico para evitar cualquier efecto adverso. También se asegura que el medicamento recetado sea el más adecuado para el dolor, logrando un tratamiento eficaz.

Tipos de pastillas para el dolor de estómago

Al momento de elegir algún tratamiento para este tipo de afección, se debe conocer cuáles son las distintas opciones de venta y para qué están indicadas. Seleccionar qué pastillas son buenas para el dolor de estómago es una tarea que debe ser orientada por un médico ya que estas molestias gastrointestinales tienen distintos orígenes. 

Se pueden clasificar por tipos según su mecanismo de acción:

• Antiácidos: estas pastillas funcionan contra la acidez estomacal al reducir la producción de ácido en el estómago al elevar el pH creando un entorno alcalino. Con esto se logra aliviar el ardor estomacal. Suelen contener bicarbonato de sodio, magnesio y calcio.
• Inhibidores de la histamina H2: también conocido como antagonista H2, ayuda a reducir la producción de ácido en el estómago al inhibir la acción de la histamina sobre los receptores H2. No solo funcionan en caso de acidez estomacal, sino que es útil para tratar cuadros de indigestión.
• Inhibidores de la bomba de protones: son utilizados para disminuir la producción de ácido en el estómago pero con una acción más potente y prolongada que los inhibidores de la histamina H2. Sin embargo, cuentan con un mecanismo de acción diferente al inhibir de forma irreversible la enzima H /K -ATPasa en la mucosa gástrica. Suelen indicarse en caso de presencia de úlceras gástricas o reflujo gastroesofágico.
• Simeticona: es un fármaco que reduce la formación de gases así como ayuda a expulsarlos, lo cual alivia los malestares como la hinchazón y el dolor.

¿Qué pastillas son buenas para el dolor de estómago?

Los tratamientos recomendados son variados según la causa del malestar. Se puede evaluar qué pastillas son buenas para el dolor de estómago según cada caso en particular teniendo en cuenta el historial médico del paciente. Entre las opciones más efectivas se encuentran:

Escopolamina

Se trata de un anticolinérgico que se receta para el tratamiento de náuseas, mareos y vómitos ocasionados por movimiento. Sin embargo, se ha comprobado que puede ser efectivo para el tratamiento de dolor de estómago o abdominal. Su mecanismo de acción se centra en inhibir la acción del neurotransmisor acetilcolina en el sistema nervioso central y periférico. Esto favorece la relajación de los músculos lisos, lo cual también se relaciona con su efecto antiespasmódico.

De esta forma, ayuda a reducir los espasmos musculares del intestino, lo cual alivia los cólicos y elimina el dolor de estómago. Es un tratamiento efectivo en casos de pacientes que sufren del síndrome de colon irritable. Suele ser muy popular su comercialización bajo el nombre de Buscapina y está combinado con paracetamol.

Su administración varía según la gravedad del cuadro, pero es común que el médico indique 500 mg de 4 a 6 horas.

Trimebutina

Una pastilla que posee un efecto antiespasmódico favoreciendo la motilidad intestinal. Con esto se logra aliviar el dolor de estómago y abdominal, aunque funciona como tratamiento ante una variedad de trastornos gastrointestinales como el síndrome de colon irritable y el reflujo gastroesofágico.

Se ha comprobado que ejerce una acción moduladora sobre los receptores de serotonina en el intestino, así como posee un efecto sobre la acetilcolina y otros neurotransmisores. Incluso actúa como antiinflamatorio sobre la mucosa.

No se recomienda en niños menores de 12 años, siendo utilizada una dosis de por toma de 200 mg con una dosis máxima diaria de 600 mg.

Dipirona

Es común encontrarla bajo el nombre de Metamizol. Si bien es un reconocido analgésico, también se utiliza para cuadros de fiebre y para reducir espasmos. Es por esta razón que suele ser útil para tratar el dolor abdominal. En el caso de alteraciones gastrointestinales, es recetado para aliviar cólicos.

En los casos que es indicado para pacientes pediátricos se calcula la dosis en función del peso, siendo recomendada una administración de 5 a 10 mg cada 6 u 8 horas. Mientras que en adultos las dosis son de 500 mg cada 6 u 8 horas, con una dosis diaria máxima de 4 gramos.

Ranitidina

Es un tipo de antiácido que se receta para el tratamiento gastritis, úlceras pépticas, pirosis o reflujo gastroesofágico. Al ser un inhibidor de los receptores de la histamina H2 ayuda a reducir la producción de ácido en el estómago.

En los pacientes pediátricos se debe administrar una dosis entre 4 y 6 mg/kg al día. Se debe dividir en dos tomas. Los adultos deben realizar dos tomas de 150 mg al día, o una sola dosis de 300 mg antes de dormir.

Omeprazol

Pertenece a la familia de los inhibidores de la bomba de protones, con lo que logra alcalinizar el estómago ayudando a reducir el ácido gástrico. Es un medicamento de venta libre que es recetado para el tratamiento de la acidez estomacal. Se ha comprobado un uso seguro en pacientes adultos. Sin embargo, se ha demostrado que puede ser eficaz para tratar reflujo en niños.

Su uso no puede ser prolongado. En adultos la dosis habitual es de 20 mg al día con un uso máximo de 8 semanas. Puede aumentarse la dosis a 40 mg en casos de ERGE o úlceras que no han cicatrizado adecuadamente. Las dosis de niños se calculan según el peso, siendo 0.7 mg/kg con un máximo de 20 mg al día.

Amoxicilina con ácido clavulánico

Se trata de un antibiótico indicado para el tratamiento de infecciones. En el caso de molestias gastrointestinales, suele recomendarse cuando existe una infección por Helicobacter pylori, siendo una bacteria causante de cuadros de gastritis, siendo el dolor de estómago un síntoma común.

Los adultos deben administrar 500 mg de amoxicilina con 125 mg de ácido clavulánico cada 8 horas por el tiempo que considere adecuado el médico. En los niños se debe emplear una dosis que varía entre 25 a 45 mg/kg al día, dividido en 2 o 3 tomas según se considere.

Sucralfato

Es un medicamento recetado para tratar úlceras gástricas y duodenales. Se ha comprobado que también actúa como protector gástrico creando una capa que protege la mucosa del estómago y el intestino. De la misma forma, es efectiva contra la esofagitis originada por reflujo gastroesofágico.

El tratamiento recomendado es de dosis de 1 gramo cuatro veces al día. Se recomienda administrar una hora antes de la comida y antes de dormir.

Domperidona

Es un antagonista de los receptores de la dopamina, favoreciendo el tratamiento de diversos trastornos gastrointestinales. Este efecto favorece la motilidad intestinal, lo cual ayuda a resolver cuadros de estreñimiento, pudiendo ser la causa del dolor de estómago. De la misma forma, alivia el reflujo, disminuye los vómitos y las náuseas, siendo útil en casos de gastroenteritis.

Se suele recetar dosis de 10 mg de 3 a 4 veces al día según se requiera. Las tomas deben administrarse antes de las comidas y antes de dormir. En algunos casos las dosis pueden ser personalizadas según la edad y condiciones médicas.

Lactulosa

Aunque no es una pastilla, se considera una excelente alternativa para este síntomas. El estreñimiento se considera como una causa del dolor de estómago, por lo que los laxantes son recomendados para tratar estos cuadros. Este medicamento ayuda a lubricar y ablandar las heces permitiendo su movimiento a través del intestino. Es un azúcar sintética metabolizada por las bacterias en el colon para ser transformada en ácido láctico, favoreciendo la motilidad intestinal.

Esta acción aumenta la cantidad de deposiciones, lo cual ayuda a expulsar las heces. De esta manera, se eliminan los gases y se alivia el dolor.